jueves, 31 de julio de 2025

LA RELOJERÍA SUIZA

     En el número 17 de la calle Claudio Marcelo existe un establecimiento que tiene la curiosa particularidad de ser más antiguo que la propia calle. Obviamente no hablo del local en sí, sería absurdo, sino del negocio instalado en él, que hace apenas unos días ha cumplido la friolera de 159 años. Se trata de la Relojería Suiza.

     Ya en 1924 era considerada uno de los establecimientos más antiguos de Córdoba por Ricardo de Montis, quien la nombra en uno de los artículos que publicaba periódicamente en el Diario de Córdoba y que acabarían dando forma a sus "Notas Cordobesas". Por él sabemos el nombre de su fundador, un empresario suizo llamado Augusto Campicci (1).


IMAGEN 1. El número 1 de la plaza de las Tendillas, a la derecha desde el punto
 de vista del observador.



     Víctor Augusto Campicci abrió su relojería el 26 de julio de 1866 en el número 1 de la entonces plazuela de las Tendillas (2), en el punto en el que las calles Siete Rincones (hoy Málaga) y Jesús y María confluían a la misma. El edificio desapareció a finales del los años 20 del siglo pasado y se encontraba situado justo delante de donde hoy se encuentra la heladería David Rico.


IMAGEN 2. El desaparecido número 1 de la plaza de las Tendillas en 1884. En rojo,
las alineaciones actuales, aproximadamente.



     En el establecimiento de Augusto Campicci se vendían relojes de todas clases, de oro, de plata, de pared, de cuadro y de sobremesa, además de gafas. A principios de 1878, una equivocación provocada por el hecho de deshacerse de gran parte de sus existencias hizo pensar a los clientes que el negocio iba a ser traspasado y que su dueño regresaba a Suiza, aunque el propio relojero lo desmintió en la prensa, donde en 1879 seguía anunciándose su negocio. Sin embargo, en 1881, la Relojería Suiza del número 1 de la plazuela de las Tendillas aparece en manos de Hermann Piaget.


IMAGEN 3. Augusto Campiche mencionado en una guía de Córdoba de 1875.



     El señor Piaget, cuyo nombre completo era Louis Hermann Piaget-Rossel Droz, era natural de Les Verriéres, una comuna suiza del cantón de Neuchâtel, y paisano de Augusto Campicci según afirma Ricardo de Montis. En esa fecha, 1881, tenía 29 años de edad y no estaba casado. Desconozco bajo qué circunstancias se produjo finalmente el traspaso que Campicci había desmentido en la prensa tres años antes, el caso es que éste último parece que no regresó a Suiza, y si lo hizo regresó pronto, ya que una relojería de Campiche (el apellido Campicci castellanizado) aparece mencionada en la localidad de Lucena en 1883. A punto de cumplir los 41 años, el 22 de abril de 1893, Hermann Piaget se casó con la joven de 22 años Lise Adéle Huguenin-Elie, natural también de Les Verrières. De este matrimonio nacerían sus hijos Hermann, Max y Thérèse.


IMAGEN 4. Otra vista de la Relojería Suiza en la plaza de las Tendillas, al fondo.



     En la relojería de Hermann Piaget, ahora además también joyería, no sólo se vendían relojes, cadenas de oro o bolsos de plata sino también productos farmacéuticos, actividad para la que obviamente no estaba autorizado y que le costó una denuncia en mayo de 1917. No era el primer encontronazo que el señor Piaget tenía con la justicia ya que unos años antes, también en mayo pero de 1910, había sido denunciado por insultar a los guardias de la policía urbana que le habían reclamado la limpieza de la cornisa de la fachada de su casa.

     Hermann Piaget falleció el 28 de Julio de 1921, a la edad de 69 años, y un mes después su hijo Máximo Piaget Huguenin se hacía cargo del negocio, heredando no sólo la relojería sino la costumbre de su padre de vender productos de farmacia: en 1923 fue multado en dos ocasiones, con 100 y 500 pesetas respectivamente, por distribuir entre sus clientes "Pagliamo", un laxante que el químico y farmacéutico italiano Girolamo Pagliamo había comenzado a comercializar con bastante éxito en 1838.


IMAGEN 5. Futuro local para la relojería.
     A finales de 1925, Max Piaget comenzó a poner en venta el mobiliario de la tienda, como estanterías, un bufete de mostrador, un armario, una cama y una mesa estufa entre otros muebles. El edificio en el que había estado el negocio desde su apertura, donde además tenían su vivienda los Piaget, iba a ser pronto derribado con motivo de la ampliación de la plaza de las Tendillas y tocaba mudarse, lo que finalmente sucedió en febrero de 1926. La nueva sede de la Relojería Joyería y Platería Suiza pasaría ahora al entonces número 19 de la calle Claudio Marcelo, número 17 en la actualidad, en el mismo edificio que ya ocupaban los Almacenes Sánchez desde el año anterior.

     En su nueva ubicación, la publicidad de la Relojería Suiza se centraba en productos de las marcas de moda como Movado, Omega o Longines, además de sus especialidades en cronómetros-taxímetros para tableros de automóviles, arreglos y objetos de regalo. Las medallas de San Rafael y San Cristóbal para proteger a los conductores en sus viajes también podían obtenerse en la tienda. Algunos años más adelante, el negocio se implementó con la compra de oro, plata, platino y brillantes. Esta nueva actividad hizo que se viera involucrado en un asunto de venta de joyas y monedas robadas, del que parece ser que salió sin consecuencias.

     Máximo Piaget Huguenin murió el 2 de octubre de 1952, siendo enterrado en el cementerio cordobés de San Rafael junto a su padre. Su viuda, Noemie Vuillermet Vernó, y sus hijos, continuaron regentando la relojería hasta que a mediados de los años 70 decidieron no continuar con el negocio, del que se haría cargo Rafael Velasco Bonilla, primero en calidad de arrendatario y algunos años más tarde adquiriéndolo en propiedad junto a un hermano.


IMAGEN 6. Sepultura de Hermann Piaget Droz y Máximo Piaget Huguenin.



     Rafael, que comenzó a aprender el oficio de engastador con tan sólo 12 años, se hacía cargo del taller situado en la planta superior y en el que hacía joyería tanto de alta gama como más asequible, mientras que los relojeros arreglaban los relojes y su mujer atendía la tienda. En la actualidad son sus hijas, Inmaculada y Eva María Velasco Pascual, las que regentan la Relojería Suiza.


IMAGEN 7. Fachada de la actual Relojería Suiza.



     Aunque el taller ya no existe como tal, el servicio de reparación sigue disponible en una tienda que aún conserva las vitrinas y expositores originales, muebles que junto al que las hermanas Velasco Pascual llaman "el reloj de la tienda" están ahí "desde siempre". Inmaculada y Eva María son dos personas de lo más amable y no tuvieron ningún problema en contestar algunas dudas que les planteé hace un par de días.


IMAGEN 8. Vitrinas, expositores y "el reloj de la tienda".



IMAGEN 9. Un reloj Omega que aún funciona como el primer día.



     Los gustos actuales y las nuevas tecnologías han hecho que teléfonos móviles y relojes inteligentes hayan desplazado al reloj de pulsera clásico, y es aún más difícil que alguien compre un reloj de péndulo, ya sea de pie o de pared. La venta de relojes, aunque sea menos habitual que en otros tiempos, la compostura de estos, la joyería y los artículos de regalo, para bebé o relacionados con la Semana Santa, mantienen aún un negocio que no sólo se encuentra entre los más antiguos de Córdoba, sino que probablemente sea el más longevo de ellos.


Rafael Expósito Ruiz.



(1) Tanto en la prensa de la época como en publicaciones como el Boletín Oficial de la Provincia, el apellido de Augusto Campicci aparece en fu forma castellanizada "Campeche".
(2) Esta localización aparece en prensa tanto como el número 1 de la plazuela de las Tendillas como de la calle Siete Rincones.




DOCUMENTACIÓN
- Biblioteca Virtual de Prensa Histórica.
- España, Provincia de Córdoba, registros municipales, 1509-1947, FamilySearch.
- Geneanet.org. Árbol genealógico elaborado por Claude Piaget.
- La indispensable guía de Córdoba y su provincia para el año 1875 por Yodob Asiul. Red Municipal de Bibliotecas de Córdoba.
- Notas Cordobesas. Recuerdos del pasado, 1911-1930. Ricardo de Montis. Red Municipal de Bibliotecas de Córdoba.
- relojeriajoyeriasuiza.es/nuestra-historia.
- Una agradable conversación con Inmaculada y Eva María Velasco Pascual.

IMÁGENES
- Imágenes 1, 4 y 5: Fotografías compartidas en el grupo de Facebook HISTORIA DE CÓRDOBA EN IMÁGENES por Antonio Moreno Bello, Miguel Ángel CB y Lolo Cordoba respectivamente.
- Imagen 2: Fotografía tomada por el autor sobre un plano de 1884 perteneciente al Archivo Municipal de Córdoba.
- Imagen 3: Recorte de una de las páginas de La indispensable guía de Córdoba para el año 1875.
- Imágenes 6 a 9: Fotografías tomadas por el autor.

jueves, 24 de julio de 2025

UNA VISITA A LOS EMBARCADEROS

     Hace unos días se me ocurrió visitar los embarcaderos del Paseo de la Ribera y de Miraflores. Seguramente tenga mucho que ver el hecho de que, mientras buscaba alguna fotografía antigua en la que se pudiera atisbar el que una vez hubo en el paso del Arenal, aunque fuese desde lejos, me he topado con infinidad de ellas en las que aparecen los ya mencionados. La temperatura no era la más idónea, pues ya desde temprano el sol cordobés apretaba, pero ya que estaba en la calle no iba a volverme atrás.


IMAGEN 1. Los dos embarcaderos en 2003.



     Construido entre 1802 y 1852, a la vez que el ya famoso murallón en el que está encastrado, el embarcadero de la Ribera tiene dos bajadas, una prácticamente frente a la salida de la calle Consolación al Paseo del mismo nombre, y una segunda algunos metros más adelante, en dirección a la de Mucho Trigo. Ya incluso antes de comenzar a bajar se da uno cuenta de que no va a ver gran cosa.


IMAGEN 2. Bajada al embarcadero en la actualidad.



IMAGEN 3. La misma bajada hace sólo unos años.



     Bajando por la primera de las rampas, la más cercana a la calle Consolación, se advierte el bosque que nos vamos a encontrar al fondo. La rampa terminaba originalmente en tres escalones que daban paso a un "descansillo" al que también desembocaba la otra rampa, y desde éste se accedía a una banqueta paralela al muro que daba acceso directamente al río. De todo esto, a excepción de las rampas, no hay ni rastro, ya que está todo cubierto de una considerable cantidad de barro seco y vegetación.


IMAGEN 4. Llegando al encuentro de las dos rampas.



IMAGEN 5. Ni rastro de los escalones.



IMAGEN 6. En 2006 aún podían verse.


     Desde este punto es imposible ver el río, ni tan siquiera averiguar si está un metro o cien más allá de donde nos encontramos, ya que la vegetación descontrolada nos lo impide. Árboles en pie, algunos caídos, muchos "jaramagos" y el mobiliario que delata la presencia de una colonia gatuna es lo único que veremos.

IMAGEN 7. Un intento de vista del río desde el embarcadero.



     Continuar en este sitio, una vez hechas algunas fotografías, no tiene mucho sentido, así es que lo más inteligente en salir por la otra rampa y fotografiar de paso algunos de los restos que indican que este lugar fue una vez un embarcadero.


IMAGEN 8. Saliendo del embarcadero por la segunda rampa.



IMAGEN 9. Una argolla reutilizada como colgador de candados.



IMAGEN 10. Restos de un medidor del nivel del agua.



     Toca ahora dirigirse al otro embarcadero, pues como dicta la lógica éstos suelen ir de dos en dos, uno para embarcar y otro para desembarcar, y viceversa. Este otro está, o estuvo, justo en frente del que acabamos de dejar atrás, en la zona del Campo de la Verdad-Miraflores, así es que para allá vamos.


IMAGEN 11. Los dos embarcaderos en 1857.




IMAGEN 12. La vegetación adueñándose de los embarcaderos.



     Tras volver los pasos hacia el puente de Miraflores y atravesarlo, hay que girar hacia el lado izquierdo y bajar hacia la última de las terrazas ajardinadas del parque del mismo nombre. No es necesario andar demasiado para encontrar un caminito que abandona la zona de césped en dirección al río. Una abertura en la valla de madera y algunos escalones nos llevan al lugar buscado.


IMAGEN 13. Vista de las terrazas desde el puente de Miraflores.



IMAGEN 14. La abertura en la valla.



     Una vez que se bajan los escalones hay que atravesar una pequeña jungla ribereña para llegar hasta el agua. Si decepcionante es lo que queda del embarcadero de la Ribera aún lo es más en el caso del de Miraflores, porque no aparece por ningún lado. Éste era más sencillo que el primero, una simple pasarela de madera que se internaba en el río, y entiendo que no se trata del mismo que aparece en la fotografía de 1857 sino uno posterior, supongo que de alrededor de 2003 que es cuando se inauguraron tanto el parque como el puente de Miraflores, pero no hay ni rastro de él.


IMAGEN 15. Camino de la jungla.



IMAGEN 16. Ya se ve la orilla.



IMAGEN 17. Ni rastro de la pasarela.



      Tal vez fuese desmontado en algún momento o simplemente acabó pudriéndose hasta desaparecer por completo, aunque tras hacer las fotografías de rigor y darme la vuelta para volverme me di cuenta de que llevaba un rato pisándolo. En un principio pensé que serían los restos de la parte de la pasarela que había sobre tierra firme y que la que se adentraba en el agua habría desaparecido, pero tras comparar imágenes de satélite de varios años se comprueba que los sedimentos que se han ido acumulando en esta zona del meandro del río han acabado por enterrarlo.


IMAGEN 18. El embarcadero, visible en 2005 y ya engullido 2022.



IMAGEN 19. El embarcadero semi enterrado.



IMAGEN 20. Detalle del embarcadero.



     Desde este punto sí se puede ver el río, e incluso meterse en él si a uno le apetece, pero del embarcadero de la Ribera que está en frente ni rastro, la vegetación hace prácticamente imposible situarlo a menos que se tome como referencia lo poco que se ve de los edificios que hay detrás.


IMAGEN 21. Ahí se supone que está el embarcadero de la Ribera.



     La visita a los dos embarcaderos ha sido bastante decepcionante, y sólo sirve para comprobar que la "desidia cordobesa" sigue funcionando de maravilla, la misma que acabará consiguiendo que los molinos de Enmedio y del Pápalo acaben por desaparecer engullidos por una vegetación descontrolada, y la que ha conseguido que por los dos ojos del Puente Romano más cercanos a la Calahorra ya no pase el agua, y pronto no lo hará ni el aire.


Rafael Expósito Ruiz.




IMÁGENES
- Imagen 1: Fotografía compartida por Jeronimo Tinoco en el grupo de Facebook CORDUBA.
- Imágenes 2, 4, 5, 7 a 10, 13 a 17 y 19 a 21: Fotografías tomadas por el autor.
- Imagen 3: Fotografía compartida por Pepe Elias en el grupo de Facebook CORDUBA.
- Imagen 6: Fotografía de Jesús Padilla González. Archivo Municipal de Córdoba.
- Imagen 11: Sección de una fotografía publicada en 1857 y atribuida al fotógrafo Charles Clifford. Lantern Slide Collection, University of Michigan.
- Imagen 12: Fotografía extraída de amoluc.es, tomada entre 2004 y 2021.
- Imagen 18: Fotografías pertenecientes al PNOA 2005 y PNOA 2022. Comparador del Plan Nacional de Ortofotografía Aérea. Instituto Geográfico Nacional.

viernes, 18 de julio de 2025

ALGO MÁS SOBRE LA BARCA DE EL ARENAL

     La semana pasada os traje la historia de una barca que se construyó en 1894 para cruzar el río desde El Arenal, aunque me centré sobre todo en su recorrido vital, muy corto todo hay que decirlo, y aunque mencioné por encima detalles como sus medidas, se quedaron atrás otras características de la barca que quizás les puedan interesar a alguien y que es lo que os traigo hoy.


IMAGEN 1. Una gabarra en el río.



     Como ya comenté, se presentaron dos proyectos por parte del entonces Arquitecto Municipal, Patricio Bolomburu, uno el 14 de mayo de 1894 y otro el 16 de agosto de ese mismo año. Como las diferencias entre ambos son básicamente monetarias, y el segundo de ellos es más completo, además de definitivo, veamos qué dice sobre la barca y los muelles que había que construir. El encabezado del mismo era «Presupuesto de las obras necesarias para construir una barca gabarra, con sus muelles á ambas orillas del rio, y colocacion de un cable para facilitar la navegacion», e incluía lo siguiente:

     - Una barca gabarra de trece metros de eslora, cuatro metros sesenta centimetros de manga, y ochenta centimetros de puntal, construida en la forma que indican los planos, con cuadernas de álamo negro, y forro hecho con tablones de pino del pais, con los refuerzos de hierro que sean necesarios, en las bandas, fondo y cubierta; debiendo tener además dos plataformas giratorias para facilitar el embarque, los cilindros necesarios para el paso del cable, y el material movil indispensable, como cadenas de amarre, bicheros Etª. (1) 4.000 pesetas.
     - 40 metros superficiales de piso construido con tablones de pino del pais, de tres centimetros de grueso, que se colocarán sobre un entramado formado con vigas, sosteniendo el conjunto sobre el número de pilotes de pino que sean necesarios para formar los puertos. 600 pesetas.
     - 60 metros cúbicos de desmonte en buen terreno, apilando las tierras en los costados, para las cajas de los caminos inmediatos á los puertos. 90 pesetas.
     - 40 metros lineales de baranda de madera, para los muelles, hecha con pilares espaciados dos metros, llenando los espacios con cruces de San Andrés. 400 pesetas.
     - Una maroma de abacá alquitranada, de ciento cincuenta metros de longitud y cinco centímetros de diámetro puesta en obra, fijando sólidamente sus extremos. 400 pesetas.
     - Transporte y colocacion en obra, de dos columnas que se facilitarán al contratista, para fijar los extremos de la maroma. 150 pesetas.
     - Quince por ciento que se adiciona en cumplimiento de lo dispuesto por la Ley. 846 pesetas.


IMAGEN 2. Sección del plano incluido en el proyecto.



     El presupuesto continúa con el Pliego de Condiciones al que debían de sujetarse las obras. No voy a transcribirlo por completo, porque sería un tostón, pero sí algunos artículos del mismo que nos darán más detalles acerca de la barca, los muelles, la maroma y los materiales que habrían de utilizarse:

     - Artículo 3º. Todas las maderas que se empleen serán sanas, secas, cortadas en época conveniente y bien conservadas y encuadradas, desechándose como inutiles las que tengan vicios manifiestos, como venteaduras (2), nudos pasantes ó saltadizos, fibras sensiblemente irregulares y vetas sesgadas: las que sean chamosas (3), heladizas, picadas, carcomidas y en general cuantas presenten cualquier otro defecto que impidan que resulten con limpieza despues de trabajadas.

     - Artículo 4º. Todo el hierro de que se haga uso así en barillas, llantas, cadenas, piezas en que se convine con la madera y otros objetos, será dulce, de buena calidad sin pajas, escamas, rebolladuras ni hendiduras y el que resulte agrio ó quebradizo, será desechado.

     - Artículo 5º. El cable será de cañamo, de la mejor calidad, de una sola pieza, y torcido en la forma que es costumbre, con el número de hilos que su grueso requiera, alquitranándolo despues de su examen.

     - Artículo 6º. El alquitran y los colores, aceites é ingredientes que hallan de usarse en la pintura, reunirán las condiciones necesarias, debiendo ser todos de la mejor calidad.


IMAGEN 3. Así ha interpretado el plano la Inteligencia Artificial.



     - Artículo 9º. La barca se construirá en el sitio que ha de utilizarse, ó en el taller que convenga al contratista, siempre que se halle situado en esta Capital, para que puedan reconocerse los trabajos cuando convenga.
     Afectará la barca, la forma y dimensiones que indica el proyecto, y se formará su armadura con maderas de alamo negro, ó de cualquier otra clase que presente igual resistencia, curbadas y unidas de la forma que se acostumbra en esta clase de construcciones, y con las piezas de hierro que sean necesarias para su refuerzo.
     El forro se hará con tablones engargolados (4), de pino del pais, fijos solidamente á la armadura.
     Las bordas ó bandas serán con entramado de viguetas, con los espacios macizados de tablon.
     La cubierta será de tablon, y se dejarán en ella cinco espacios cubiertos con tapas, que podrán levantarse para facilitar el achique.
     A las estremidades, llevará la barca unas plataformas unidas por charnelas (5), y sostenidas por cadenas con su torno correspondiente, para el giro y facilitar el embarque.
     En una de las bandas llevará además los cilindros entre los que se ha de colocar el cable.

     - Artículo 10. Todas las juntas del fondo, costados, bandas y cubiertas, se calafatearán en forma conveniente para impedir la entrada de agua.


IMAGEN 4. Uno de los dos muelles según el proyecto.



     - Artículo 11. Los muelles se construiran clavando pilotes de pino de diez centímetros de diámetro en la cabeza, y de la longitud necesaria segun la clase de terreno que se encuentre.
     Sobre las cabezas de los pilotes se formará un entramado horizontal con viguetas, y sobre estas se clavarán los tablones de piso, dejando entre ellos algunas ranuras para la salida del agua.

     - Artículo 12. Los pilotes deberan clavarse en el terreno por medio de una machina, ó un mazo de suficiente peso, golpeando hasta que éste rebote sobre la cabeza.

     - Artículo 13. Los pilotes, las maderas de los muelles, y esteriormente la barca, recibirán tres manos de alquitran, pintando despues la barca sobre ésta base con el tono que se indique.

     - Artículo 14. Hechos los muelles ó puertos, se desmontará el terreno en la forma conveniente para formar dos caminos que conduzcan á los mismos.

     - Artículo 15. Se facilitarán al contratista dos columnas, que tendrá obligacion de transportar y colocar en obra, adicionandolas unas asillas de hierro dulce, emplomadas en un extremo, para fijar la maroma.


Rafael Expósito Ruiz.

     


(1) Etcétera.
(2) Raja o hendidura debida a la dilatación.
(3) Atacada de hongos.
(4) Ensamblados mediante una lengüeta que entra en una hendidura.
(5) Bisagras.




DOCUMENTACIÓN
- Expediente relativo a la construcción de una barca en el sitio del Arenal para facilitar el paso sobre el Guadalquivir. ( Contiene planos). 1894. SFC 02156-071. Archivo Municipal de Córdoba.

IMÁGENES
- Imágenes 1 y 3: Imágenes creadas por ChatGPT.
- Imágenes 2 y 4: Fotografías tomadas por el autor sobre el plano perteneciente al expediente citado en la documentación.

sábado, 12 de julio de 2025

UNA BARCA PARA CRUZAR EL RIO

      En enero de 1894, la Hermandad de Labradores de Córdoba envió un escrito al Ayuntamiento, solicitando la puesta en servicio de una barca que conectara la capital con la campiña a través del río Guadalquivir en el sitio del Arenal, evitando así el rodeo que suponía para algunos el tener que hacerlo por el Puente Romano y abaratando de paso el transporte de frutos y cereales entre ambas zonas.


IMAGEN 1. Vista parcial de Córdoba con El Arenal al fondo.



     No se trataba de una iniciativa novedosa, de hecho ya se venía haciendo desde algunos siglos atrás (1), sino de una solicitud de reanudación del servicio, puesto que la anterior barca había sido arrastrada por las aguas tras la crecida del Guadalquivir de marzo de 1891 y aún no había sido repuesta. El citado escrito apuntaba las razones por la que hasta ahora se realizaba y por qué el Ayuntamiento debía reestablecer el paso de la barca del Arenal:

     «Tubose presente, que las comunicaciones del otro lado del rio, las que reclaman algunos poblados vecinos y el servicio público en general, no es posible humanamente pensando que se haga por las cuestas de los Barreros para entrar por el Puente, á causa de la condición arcillosa del terreno que le hace intransitable por completo en los tiempos húmedos. Se aprecio como razón poderosa la larga distancia que se recorre por este sitio y los desniveles del terreno que a veces arrojan una inclinacion del doce por ciento, pendiente que hace carisimo el transporte de frutos en tiempo de verano, é imposible en el invierno y sobre todo consideró muy justo la corporación el disminuir transito por los barreros para aminorar el inmenso daño que en tiempo de las lluvias sufren los predios limitrofes al camino, cuando ganados y personas tienen que retirarse de la senda conocida para defenderse de los grandísimos lodazales que allí se forman».


IMAGEN 2. El Guadalquivir pasando entre Miraflores y El Arenal.



     Antes de continuar, y con respecto al sitio por el que cruzaba la barca, confieso que no tenía mucha idea de cuál podría ser exactamente. En el escrito de los labradores se habla de «una barca capaz para todos los usos de la agricultura, en el indicado sitio del arenal para salir al arroyo de la barca...» que tampoco me aclara gran cosa, así es que lo mejor es acudir a las Notas Cordobesas de Paco Muñoz, en el que hay una entrada muy interesante al respecto. Solo se me ocurre que se refiera a la "colada de la barca", que junto al arroyo de los Sarnos llega hasta el Guadalquivir en el punto que aparece marcado en diversos planos como sitio de paso de la susodicha. Pero no nos desviemos.

IMAGEN 3. Paso de la barca del Arenal.



     Con el visto bueno de las Comisiones de Policía Rural y de Hacienda, el Ayuntamiento encargó la redacción de un proyecto al arquitecto municipal Patricio Bolomburu. Dicho proyecto, firmado el 14 de mayo de 1894, contemplaba la construcción de una barca gabarra de 15 metros de eslora, 4,60 metros de manga y 80 centímetros de puntal, una maroma de abacá (2) alquitranada de 150 metros de longitud y 5 centímetros de diámetro, dos muelles de 20 metros cuadrados apoyados sobre pilotes, uno a cada lado del río, dos columnas para amarrar los extremos de la maroma y el arreglo de los caminos para acceder a éstos.


IMAGEN 4. Planta y secciones longitudinal y transversal de la barca según proyecto.



     El coste total del proyecto, 7.015 pesetas, superaba lo que el Ayuntamiento presidido interinamente por Manuel Eguilior pensaba gastarse, por lo que se solicitó al Arquitecto uno nuevo que contemplase algunas rebajas, y que fue firmado el 14 agosto del mismo año. Una vez abaratado el presupuesto, reduciendo de paso el largo de la barca de 15 a 13 metros, finalmente se quedó en 6.486 pesetas, siendo aprobado por el Ayuntamiento el día 22. El anuncio de la subasta para la construcción de la barca y los dos muelles se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia del 1 de septiembre.

     Finalmente, la barca se puso en servicio el 20 de diciembre, casi cuatro años después de que a la anterior se la llevara una riada. Los precios de los pasajes acordados por el Ayuntamiento, que era el propietario de la misma y arrendador del servicio, eran los siguientes: 5 céntimos de peseta por cada persona o caballería sin carga, 10 céntimos por cada caballería cargada, 25 céntimos por cada carro o carreta sin carga con una o dos caballerías, 50 céntimos por cada carro o carreta cargado con una o dos caballerías, y 75 céntimos por cada carruaje con una o dos caballerías.


IMAGEN 5. Planta y alzado de los muelles según proyecto.



     El precio que tenía que pagar al Ayuntamiento cualquiera que quisiera hacerse cargo de este servicio era de 250 pesetas anuales, y no debía ser muy lucrativo el negocio para el posible arrendatario puesto que cuando en noviembre de 1897 se abrió la licitación para los siguientes dos años y medio no se presentó nadie. Tras un segundo intento fallido, finalmente el Ayuntamiento encargó el servicio de la barca a José López Puntas, en enero de 1898. No parece que llegara a hacerse cargo, y si lo hizo fue por poco tiempo, pues en agosto de ese mismo año la barca estaba abandonada en mitad del río y con la mayor parte de las maderas podridas.

     Para cuando llegó diciembre la barca estaba ya totalmente sumergida en el agua, y se decidió sacar a subasta la venta de las maderas que se pudieran aprovechar, cosa que en abril del año siguiente, 1899, aún no se había logrado, por lo que finalmente se acordó que el director del Asilo Madre de Dios fuese quien se hiciera cargo de ellas. Ni fue la primera, ni sería la última barca que haría las funciones de puente en una zona donde no existía, aunque tal vez fue la más efímera puesto que no llegó a durar ni siquiera tres años.


Rafael Expósito Ruiz.




(1) Aunque no tengo la certeza de que se hiciera de forma ininterrumpida, existen documentos en el Archivo Municipal de Córdoba que tratan el tema de la barca del Arenal desde 1490 en adelante.
(2) Abacá: m. Planta de la familia de las musáceas, de unos tres metros de altura, originaria de Filipinas, y de cuyo tronco se saca un filamento textil. dle.rae.es.




DOCUMENTACIÓN
- Biblioteca Virtual de Prensa Histórica.
- Expediente relativo a la construcción de una barca en el sitio del Arenal para facilitar el paso sobre el Guadalquivir. ( Contiene planos). 1894. SFC 02156-071. Archivo Municipal de Córdoba.
- LA COLUMNA IMITACIÓN MILIARIO, DEL PASO DE LA BARCA DEL ARENAL. notascordobesas.com.

IMÁGENES
- Imagen 1: Sección de una fotografía publicada en 1857 y atribuida al fotógrafo Charles Clifford. Lantern Slide Collection, University of Michigan.
- Imagen 2: Fotografía de Joe J. Heydecker, 1959. Österreichische Nationalbibliothek - Austrian National Library.
- Imagen 3: Sección de un plano perteneciente a la Colección de Mapas Topográficos de la Provincia de Córdoba, Atlas 1890-1922. Cartoteca del IGN.
- Imágenes 4 y 5: Montajes realizados por el autor a partir de varias fotografías tomadas sobre un plano perteneciente al expediente citado en la documentación.

sábado, 5 de julio de 2025

ÍNDICE DE PUBLICACIONES DE QURTUBA FABULAS. AÑO V (JULIO 2024 - JUNIO 2025)

     Según el calendario qurtubafabuliano, palabro que acabo de inventarme, hoy es el día 1 del año sexto D.Q.F. (Después de Qurtuba Fabulas). Atrás se queda el quinto, un año en el que he seguido trayendo una nueva entrada cada semana para alcanzar finalmente la redonda cifra de 200 entradas, y que si los hados están de mi parte espero que se conviertan en 400.

     Me encanta lo que hago, mejor o peor, y continuaré haciéndolo mientras la chispa se mantenga encendida. Lo hago en parte por mí, porque me gusta y me mantiene mentalmente activo, pero sobre todo por que sé que hay personas que disfrutan leyendo lo que escribo y seguramente sin ellas esto no tendría mucho sentido. A todas ellas les digo: GRACIAS, MUCHAS GRACIAS. Y ahora, tras esta parrafada pseudolacrimógena, ahí va el repaso a lo que dieron de sí los últimos 365 días.



AÑO 2024 (julio a diciembre)













































AÑO 2025 (enero a junio)















































Rafael Expósito Ruiz.




IMÁGENES
- Fotografías tomadas por el autor.




ÍNDICES ANTERIORES